Conocí a C.J. Tudor con su libro El hombre de tiza, un thriller con toques de terror de esos que se leen rápidamente, pero que al mes se te ha olvidado. No obstante, la premisa de su última novela me llamó más la atención.
Chapel Croft es un pueblo de Sussex, Inglaterra, al que llega una nueva vicaria (Jack) y su hija Flo. Las dos huyen de Nottigham por motivos que se irán descubriendo poco a poco. Por otra parte, al ser un pueblo muy pequeño, Chapel Croft está lleno de secretos y de historias chungas vecinales. Sin embargo, la tragedia más importante que ha sufrido el lugar aparece en los libros de historia, y fue la purga que hizo María Sangrienta. La...
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